Los vapeadores, se han vuelto muy populares como una alternativa menos dañina que fumar tabaco tradicional, y que además es una oferta que promete contaminar menos el medio ambiente. Algo que rs curioso sobre los vapeadores es que es una idea que se concibió hace más de 90 años siendo más especificos en 1927, cuando Joseph Robinson tuvo la idea de un «vaporizador eléctrico» inhalar vapor en lugar de tabaco quemado, lo cual fue patentado, pero no se creo sino hasta 2003.

El farmacéutico chino Hon Lik, tras la muerte de su padre fumador, creo el cigarrillo electrónico algo que es muy popular hoy en día incluso en paises como Colombia pero la pregunta es: ¿realmente hay diferencias entre un vapeador y un cigarrillo? 

Según Relx, una de las empresas más grande de vaporizadores del mundo, estos son algunas de las diferencias que existen entre ambas actividades y el impacto que tienen en la salud y nuestro ecosistema:

• Menos toxinas para la salud

Los vapeadores están diseñados para que el líquido se caliente y se convierta en vapor, que se inhala después por la boquilla. No queman tabaco como los cigarrillos, presumiendose que son ingredientes menos tóxicos, ya que los líquidos para vapear pueden o no contener nicotina, lo que si es eliminado es el alquitrán, uno de los químicos más nocivos presentes en los cigarrillos ni otras sustancias nocivas como lo es el plomo, arsénico, amoniaco, benceno y ácido cianhídrico. 

De acuerdo al Royal College of Physicians de Londres, los cigarrillos electrónicos son un 95% menos nocivos que el tabaco y son dos veces más eficaces para ayudar a los fumadores adultos a dejar de fumar que otras opciones como los parches o lo chicles de nicotina.

• Las colillas de cigarro son enemigas del medio ambiente

Según el Ministerio de Salud de Colombia, el número de fumadores de tabaco ha disminuido en los últimos años como parte de la campaña FCTC 2030 del gobierno colombiano. Un estudio sobre calidad de vida publicado en 2022 por el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE) mostró que el número de fumadores de tabaco se redujo del 8,3 % de la población en 2016 al 5,6 % en 2021.

Sin embargo, las colillas siguen siendo un gran problema medioambiental. Según un estudio realizado en 2020 por la Universidad Piloto de Colombia, cada año se arrojan a las calles de la capital, Bogotá, unos 94,4 millones de colillas, con un peso aproximado de 16 toneladas. Éstas están hechas de acetato de celulosa, un material no biodegradable, derivado del petróleo y que puede tardar hasta 25 años en degradarse y contaminar hasta 50 litros de agua dulce. 

• La ventaja de los vapeadores es que tienen la opción de reciclarse

Los vapeadores también pueden contaminar, sobre todo los dispositivos desechables. Por eso es importante reciclarlos. Algunas marcas permiten devolver los vapes usados a sus tiendas. Las baterías de los vapeadores están fabricadas con metales pesados y pueden ser tóxicas para el medio ambiente, por lo que es importante llevarlas a los vertederos de reciclaje electrónico, donde la batería y otros componentes pueden extraerse y reutilizarse. 

Desde tu casa también puedes hacer el cambio: para eliminar el material de relleno del cartucho, deberás enjuagar hasta que no queden residuos de nicotina en el interior del dispositivo y luego envolver los desechos en un pedazo de periódico o cualquier otro material biodegradable. 

• Contaminación del aire: fumar contamina más que vapear

Tanto los vaporizadores como los cigarrillos contaminan el medio ambiente, pero los cigarrillos más. La Organización Mundial del Salud (OMS) destaca que el tabaco contamina el aire de forma peligrosa en espacios cerrados, pues contiene más de 5,000 sustancias químicas, 69 de las cuales se sabe que son cancerígenas. Un estudio del Departamento de Química Analítica de la Universitat de València de 2016, demostró que, tanto fumar como vapear contribuyen a contaminar el ambiente. Sin embargo, el vapeo produce tres veces menos emisiones de partículas que el humo. 

En cuanto a la nicotina, una de las principales preocupaciones entre fumadores y vapeadores, una investigación similar también realizada por Miguel de la Guardia, investigador principal del estudio de la Universitat de Valencia, analizó la cantidad de nicotina en la saliva de fumadores pasivos y vapeadores, con cigarrillos electrónicos y convencionales. Descubrieron que la saliva de los fumadores pasivos tenía niveles de nicotina de entre 40 y 80 miligramos por litro de saliva, mientras que los vapeadores pasivos tienen niveles de entre 4 y 8 mg por litro, lo que supone siete veces menos exposición a la nicotina para los vapeadores pasivos.

Recuerda que fumar es perjudicial para la salud y lo ideal siempre será no hacerlo en absoluto pero según muchos reportes el vapeo responsable está ayudando a millones de personas en todo el mundo a dejar de fumar tabaco tradicional, además de reducir el impacto que el tabaco causa en el medio ambiente siendo algo que debería regularse y diferenciarse correctamente este tipo de dispositivos y los cigarrillos tradicionales.