En un mundo donde los accidentes con smartphones son comunes, y las condiciones climáticas pueden ser impredecibles, es fundamental entender las certificaciones de resistencia que ofrecen los fabricantes. Siglas como IP68, IPX8 o MIL-810H no solo son términos técnicos; representan un escudo contra los elementos.
Certificaciones IP: Polvo y agua bajo control
Las siglas IP significan Ingress Protection (Protección contra la Penetración) y clasifican la resistencia de los dispositivos frente a sólidos y líquidos:
- Primer número: Grado de protección contra sólidos, de 0 (sin protección) a 6 (protección total contra el polvo).
- Segundo número: Nivel de protección contra líquidos, de 0 a 9 (resistencia a agua a alta presión y temperatura).
Por ejemplo:
- IP68: Protección completa contra polvo y resistencia a la inmersión en agua dulce hasta 1.5 metros durante 30 minutos. Perfecto para quienes buscan fiabilidad bajo lluvia o en piscinas.
- IPX8: Resistencia al agua similar, pero sin pruebas certificadas contra el polvo. Un ejemplo son dispositivos con diseño que naturalmente repele sólidos, como los Motorola Razr 50.
Certificaciones menores, como IP52, protegen de salpicaduras leves y polvo en cantidades moderadas, ideales para entornos urbanos.
MIL-810H: Durabilidad de grado militar
La certificación MIL-STD-810H, desarrollada por el Departamento de Defensa de los EE. UU., evalúa dispositivos en condiciones extremas. Entre las pruebas destacan:
- Temperaturas extremas: Desde -20°C hasta 60°C.
- Humedad y lluvia: Funcionamiento en climas tropicales o lluviosos.
- Altitud y vibración: Uso confiable en alturas o en transporte.
- Resistencia a impactos: Protección contra caídas y golpes frecuentes.
Por ejemplo, el Motorola Edge 50 Ultra combina las certificaciones IP68 y MIL-810H, lo que lo hace ideal para usuarios aventureros que buscan fiabilidad en cualquier entorno.
¿Cuál elegir?
Si buscas protección diaria contra agua y polvo, IP68 es suficiente. Sin embargo, si trabajas en entornos extremos o necesitas un dispositivo todoterreno, opta por uno con MIL-810H. Y recuerda: ninguna certificación hace que tu smartphone sea “resistente al agua” de forma absoluta, por lo que siempre debes seguir las recomendaciones del fabricante.